Que todo fluya y que nada influya

 Cerré mi entrada anterior contándoles que, de todas las comunas a las que había contactado, solo una había contestado.

Me habían dado un turno: 22 de enero del 2020 a las 14.30 hs.

 

Cuando obtuve ese turno todo lo que parecía estar trancado, de repente empezó a fluir con una facilidad y velocidad imposible de creer.

Si en enero tenía que estar en Italia, cuando iba a viajar? En que momento iba a empezar a juntar todos los papeles que tenía que juntar? había vida en marte? la policía sabía que asuntos internos les tendía una trampa? #crisis

Por suerte, el "temita" económico había tenido una "solución".

El acta que llevaba más de un año buscando, había aparecido ( esa es una historia imperdible..con todos los condimentos) así que solamente tenía que meterle pata a juntar todo lo que me faltaba, legalizar, apostillar (toda una aventura), traducir y el famoso visto consular (50 dólares y te saco el turno en el consulado de córdoba :D).



No lo dije en la sección "sobre mi", pero...soy #simpsonfan así que probablemente haga muuuuuchas referencias a ellos en mis "entradas" y salidas..cuek.

Volviendo al tema, todo empezó a salir tan bien que hasta pensé que quizá estaba muerta ó soñando ó en coma.


Me faltaba el certificado de no naturalización de mi bisnono, el papel más importante de toda la carpeta....era #EL papel. Ese papel, que aún no tenía, es el que te dice si vas a poder (o no) solicitar la ciudadanía iure sanguinis. Pero como yo me creo mil, compré los pasajes.


Algún día les voy a contar como armar la carpeta para la doble ciudadanía y no morir en el intento (y sin gestores, un dato que es mucho muy importante).

Fue un día sábado. Una semana antes de las famosas P.A.S.O de argentina.

Estaba con mi papá y mi mamá. Mi vieja es toda una visionaria y un gran elemento de presión si necesitas conseguir algo. Consideraba que, si no "presionábamos" a mi papá en ese momento para que me preste su tarjeta, no me iba a ir Jamás (nunca no).

Mi mamá metió pecho, mi papá soltó las tarjetas y yo...me senté a emitir mis pasajes al paraíso.


Paso una vez, nada. Paso dos, nada. Paso tres veces, nada. Mi papá ya lo estaba repensando y yo..sssshhoooorabaaaaa internamente.

Mi papá se va al patio y yo me dije, "volvé a probar, es ahora ó....jamás".


Agarre una tarjeta x , le puse 1 pago, elegí...y casi me infarto:


Una semana después, P.A.S.O mediante y con un dólar poco cariñosito, costaban casi un 50% más (contando que tuve que sacar ida y vuelta a solicitud de migraciones).

Un mes después me llegaba el certificado de no naturalización, todo había salido bien, tenía luz verde para viajar y mi vieja, la vidente, lo había hecho de nuevo.

A ella, todo.


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